Yoga en Casa de la Mujer Atacames

Yoga para sanar: el primer taller en la Casa de la Mujer

Nueva Esperanza era el barrio más temido de Atacames. Conocido como ‘La Trece’, muchos ni se atrevían a cruzar el puente que lo conecta con el centro de la ciudad. Se hablaba de robos y hasta de muertes.

Pero eso está cambiando: los mismos habitantes de este sector van saliendo adelante mientras trabajan en comunidad. Con la construcción de la Casa de la Mujer, el barrio ha empezado a vivir otra dinámica. Este centro de emprendimiento está dedicado a impulsar la formación en oficios de las mujeres; también es un centro comunitario donde ellas pueden disfrutar de un lugar seguro y hasta de sanación.

Fundación Raíz organizó el primer taller en la Casa de la Mujer. Gracias al apoyo de Cristina Landázuri, instructora de yoga y pilates, cerca de 10 mujeres del barrio tuvieron su primera experiencia con la práctica del yoga. Fue un día donde ellas pudieron salir de su rutina para explorar su cuerpo, relajarse y sanar.

Aquí el testimonio de Cristina, a quien le agradecemos por su tiempo y por su disposición para compartir su conocimiento con las mujeres de Nueva Esperanza:

Fundación Raíz: ¿Qué significa para ti compartir un conocimiento tuyo (el yoga) con mujeres vulnerables?

Cristina: Compartir con estas mujeres es recibir su fuerza.  Doy un servicio en el que recibo mucho más a cambio. Recibo su energía, su fuerza, sus miradas, sus sonrisas y su cariño.

F.R.: ¿Cómo ayuda el yoga al bienestar de las mujeres?

Cristina: Les permite sentir su cuerpo. Este es un canal que les permite mover energía estancada en ciertas partes. Especialmente, a las mujeres nos ayuda a remover la energía acumulada en nuestras caderas, pues guardamos mucha información emocional en ese lugar. Pero además les ayuda a abrir más su corazón y a experimentar el alivio de la respiración y de llevar la mente al tiempo presente, sin pensar en nada más.

F.R.: ¿Cómo reaccionaron las mujeres en el taller?

Cristina: Las chicas reaccionaron con mucho alivio y sentí que se fueron con mucha paz. Además de irse con una sonrisota dibujada en su carita.

F.R.: ¿Qué opinas de la Casa de la Mujer en Nueva Esperanza?

Cristina: La casa de la mujer, además de estar con una vibra hermosa, es un espacioso maravilloso para que muchas personas puedan compartir todos sus conocimientos con estas mujeres. A ellas les da la oportunidad para usar este centro como una herramienta para aprender y emprender, haciendo que se empoderen y se unan entre ellas.

«Mi anhelo ha sido llegar con el yoga a gente de escasos recursos o que no pueden pagar una clase de yoga»

Cristina Landázuri

La Casa de la Mujer está pensado como un centro comunitario para el intercambio de conocimientos. Si quisieras impartir algún taller o hacer un aporte, comunícate con nosotros a info@fundacionraizec.org